Denise Miracle trabajaba en el mostrador de boletos de American Airlines en el aeropuerto de Sacramento cuando descubrió una situación perturbadora. Dos chicas de 15 y 17 años, viajaban solas con boletos de ida a Nueva York. Parecían inseguras sobre sus planes de viaje y no tenían documentos. Los boletos habían sido comprados con una tarjeta de crédito perteneciente a alguien con distinto apellido que ellas dos, por lo que no era uno de los padres. Y actuaban de forma extraña.
Siguió explicando por qué vio una señal de alerta: “Eran boletos de primera clase. Eran muy caros. Le dije a un supervisor: ‘Voy a llamar al comisario. Esto no me parece bien’”, dijo.
Eventualmente las adolescentes revelaron que los boletos habían sido comprados por un hombre que conocieron en Instagram. No tenían idea de que se habían puesto en peligro.
Denise llamó a la policía, y el oficial Todd Anderson informó a las chicas que el hombre con el que habían estado tratando muy probablemente no fuese real. De hecho, probablemente había estado atrayéndolas a una trampa.
Resultó que el hombre que había comprado los boletos les había prometido trabajos de modelaje en Nueva York. Ninguno de los padres de las chicas sabía que estaban viajando, y habían mentido acerca de quedarse a dormir en casa de la otra. Cuando el oficial investigó un poco más al hombre, sus perfiles en línea desaparecieron rápidamente. Esta es otra señal de que el tipo era malas noticias.
Estas dos jovencitas no tenían idea de lo que estaban por hacer, y podrían haber terminado en una situación peligrosa, potencialmente mortal. Afortunadamente para ellas, Denise estuvo cuidándolas ese día, y regresaron a la seguridad de sus casas.
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