James Moskito y su equipo de voluntarios estaban en el agua cuando una ballena jorobada salió a la superficie. La ballena vio a James y lo miró directamente a los ojos, tratando de comunicarle algo. Fue entonces cuando James se dio cuenta de que la pobre ballena estaba enredada en una red de pesca de cangrejos de 1 milla cerca de las islas Farallón. [googlead] A pesar de estar en las aguas frías casi congeladas y infestadas de tiburones, James y su equipo trabajaron durante 5 horas para liberar al pobre animal. Vea la historia increíble en el video de abajo y asegúrese de no se perderse la forma en que la ballena demostró su agradecimiento a todos los miembros del equipo de rescate.