Como humanos, es común para nosotros reconocer que estamos en la cúspide de la cadena alimenticia y, por lo tanto, nos consideramos los seres más inteligentes del planeta. Si bien eso podría ser verdad, debemos reconocer que otros animales también son extremadamente inteligentes.
El hecho de que los animales no se parezcan a nosotros, ni vivan como nosotros ni se comuniquen de la misma manera no significa que no sean inteligentes. De hecho, muchos animales son brillantes y capaces de compleja comunicación. En muchos casos sólo estamos comenzando a comprender la profundidad de la inteligencia y capacidad de sentir emociones de estos animales.
Si tienes una mascota, como un perro o gato, probablemente hayas notado las muchas maneras en que intentan comunicarse contigo. Piden comida, salir fuera y afecto. Los perros, especialmente, son muy buenos para advertirnos el peligro, o al menos lo que ellos piensan que es peligroso —como el cartero o un extraño.
Pero imagina si el animal que intenta advertirte de un peligro es una enorme ballena. Esto es exactamente lo que le sucedió a la bióloga de ballenas Nan Hauser. Estaba nadando con su equipo fuera de Playa Muri, en las Islas Cook, Pacífico sur, cuando una ballena jorobada de 50.000 libras se aproximó a ella. Nadó hacia ella y la empujó a través del agua con su cabeza y su boca, luego la metió bajo su aleta pectoral.
Pronto se dio cuenta de que la ballena estaba intentando protegerla de un cercano tiburón tigre, el cual es potencialmente peligroso para los humanos. La bióloga cree que es la primera vez que el instinto natural de las ballenas por proteger a otras especies animales, incluyendo humanos, fue capturada en video.
Mira el video de abajo para ver este asombroso encuentro. Cuando Nan está a salvo al fin, la ballena hace algo sorprendente.