Llega cierta edad en que uno se da cuenta de que el borroso mundo en que ha vivido toda su vida no se supone que sea borroso. Dependiendo en lo mala que sea la visión, uno podría no saber que tiene mala vista hasta que en la escuela se da cuenta de que sus compañeros pueden ver el pizarrón sin entrecerrar los ojos, mientras que uno no puede hacerlo.
Un bebé tenía tan disminuida la visión que fue captado en cámara antes de que supiese hablar siquiera, mucho menos darse cuenta de que su visión no era normal. Luego de que los padres del bebé Christian se dieran cuenta de que algo andaba mal, los médicos le prescribieron su primer par de gafas.
Christian recibió un par de gafas infantiles celeste bebé de textura suave que aseguran tanto comodidad como funcionalidad adecuada. Antes de probárselas, los padres de Christian decidieron filmar su reacción, para bien o para mal. Sus padres probablemente esperaban lo último, pues los bebés no suelen entusiasmarse respecto de llevar gafas.
Cuando mamá está por colocar las gafas en el rostro de Christian, se lo ve confundido, asustado y molesto, todo a la vez. No es de sorprender. Sin embargo, una vez que las gafas son colocadas en su lugar, está claro que nota la diferencia. Desde sus enormes y curiosos ojos hasta su boca completamente abierta, y unas eventuales risitas de placer, el pequeño está completamente sorprendido cuando se conecta con sus “nuevos” alrededores. Las líneas borrosas se hacen cristalinamente claras.
El hecho de que tengamos dispositivos que permiten ver a quienes padecen visión disminuida es impresionante y algo por lo que todos debemos estar agradecidos.
Para ver toda la reacción de Christian al ver claramente por primera vez, no dejes de ver el video de abajo.