Todos tenemos un amigo que se asusta de algo pequeño, como bichos, arañas o ratones. Aunque estos miedos son algo relativamente común, no tienen mucho sentido. Si lo piensas, los humanos son mucho más grandes que bichos, arañas o ratones, y en realidad somos mucho más una amenaza para ellos que ellos para nosotros.
Parece que los humanos no son las únicas criaturas que se asustan con facilidad de cosas que no pueden hacerles daño. Una familia en un safari pudo observar una manada de elefantes. Entre ellos había un elefante bebé. Hizo una pausa como si observara a los humanos, cuando hizo algo que nadie esperaba: estornudó. Y aún más sorprendente, ¡pegó un gran salto de sorpresa por su propio estornudo!
Josh Plotnik, un investigador del comportamiento de los elefantes de la Universidad de Cambridge y jefe de investigación sobre elefantes para la Fundación Triángulo Dorado de Elefantes Asiáticos en Chiang Rai, Tailandia, fue entrevistado por Livescience y habló específicamente sobre la tendencia de los elefantes a asustarse por prácticamente cualquier cosa.
Durante la entrevista, Josh compartió esta información:
“En la naturaleza, cualquier cosa que repentinamente corra o repte cerca de un elefante puede sobresaltarlo. No tiene que ser un ratón; perros, gatos, serpientes o cualquier animal que haga movimientos repentinos cerca de las patas de un elefante puede sorprenderlo”.
Esto es bastante sorprendente, dado que los elefantes son animales grandes que pueden protegerse a sí mismos con su mero tamaño. En grupo, los elefantes son aún más intimidantes. Sin embargo, sabemos que son animales tiernos e inteligentes, por lo que es razonable suponer que pueden protegerse evitando algo que los asuste, en lugar de levantarse y luchar.
Cualquiera sea la razón, ¡ver a un elefante asustarse por su estornudo es adorablemente cómico, por lo que te recomendamos que lo veas abajo!