Soy una persona con mucha suerte cuando se trata de mascotas. ¿Por qué? Porque mis perros y gatos son los mejores, absolutamente. Estoy segura de que muchas personas sienten lo mismo respecto de sus animales, pero en mi caso es verdad. Son una fabulosa compañía y ponen una sonrisa en mi rostro todos los días. Y mejor aún: todos son rescatados.
Cada uno vino de un refugio de animales, y dos de mis muy especiales perros eran considerados ‘inadoptables’ cuando los traje. Mi gran terrier mestiza estaba tan enferma en el refugio que no podían costear el tratamiento; la única alternativa era ponerla a dormir. Pero llegué yo y le di los cuidados que necesitaba. Eso fue hace 14 años. Soy consciente de que no es la perra más bonita del mundo; tiene cicatrices y un pelaje desaliñado, pero para mí ella es la perra más hermosa del mundo.
BenBen el gato tiene una historia similar a mi chica.
BenBen fue llevado al refugio con una oreja coliflor, la columna aplastada y varias laceraciones profundas. Los trabajadores del refugio piensan que fue atacado por un animal más grande.
Sus lesiones le jugaban en contra respecto de su apariencia adorable, por otra parte adorable, así que el refugio lo consideró inadoptable.
Los veterinarios también dijeron que jamás podría volver a caminar y necesitaría medicación para el dolor por el resto de su vida.
En el refugio, él se sentaba calladito, triste, esperando que alguien viniera a rescatarlo.
Cuando nadie vino por él, el refugio decidió que era tiempo de poner a dormir a BenBen.
Pero justo antes de la eutanasia programada, una amable mujer que era empleada en un hospital veterinario supo sobre BenBen y decidió darle una oportunidad.
El refugio le dijo que BenBen ya no se movía ni quería comer. Sencillamente se había rendido y no quería vivir.
Pero la mujer y su novio lo llevaron con ellos a su hogar de todas maneras.
A la hora de haber llegado a su nuevo hogar, BenBen comenzó a cambiar.
Estaba feliz, contento y relajado en ese nuevo entorno.
Quizás lo más sorprendente fue que BenBen pudo volver a caminar, e incluso saltar. Sólo necesitaba un poco de amor y un hogar seguro. ¡Estamos tan contentos por BenBen!
Fuente: DailyMail
¡Qué maravillosa historia! Gracias a Dios por las personas amables y cariñosas de este mundo. Si disfrutaste la historia de BenBen, por favor compártela con tu familia y amigos.