Los animales a menudo son desacreditados por el vínculo que comparten con otros. El dicho dice: “El perro es el mejor amigo del hombre”. Sin embargo, jamás es lo contrario; muchos creen que a los canes no les importan ni aman a otros humanos o animales de la forma en que lo hacemos nosotros. Sin embargo, lo que un hombre presenció en un refugio de animales prueba que este último punto no es correcto.
Yendo a la historia viral, Merrill, una pitbull de 3 años, pronta a ser adoptada luego de vivir durante años en el refugio Rocket de rescate de animales sin fines de lucro en Oakland, California.
Durante su tiempo en el refugio, Merrill se hizo amiga de un chihuahua de 8 años llamado Taco. Incluso cuando Merrill necesitó una cirugía, Taco se quedó a su lado. A ambos amigos jamás les entusiasmó la idea de ser separados uno del otro, y a menudo se los encontraba acurrucados juntos.
Luego sucedió algo. Cuando el nuevo dueño de Merrill vino a recogerla para llevarla a casa, Merrill comenzó a gimotear. Taco también comenzó a llorar temiendo que a su mejor amiga Merrill se la llevarían.
Fue entonces que el hombre decidió no sólo llevarse a Merrill, sino también a Taco. Ambos chuchos ahora viven felices en el cálido y cariñoso hogar provisto por su nuevo dueño.
Ambos amigos pueden ser encontrados aún acurrucados juntos, y pasando incontables horas cerca el uno del otro. Si no pueden estar juntos, Taco y Merrill lloran hasta que pueden verse otra vez.
Esta última historia prueba que algunas almas simplemente están destinadas a estar juntas.
Como los humanos, los perros son criaturas sociales. Tienen la capacidad de sentir afecto, amor, mostrar que les importa y crear un vínculo con otros. Actuar como si los animales no tuvieran inteligencia emocional está lejos de ser verdad.
Para conocer más sobre Merrill y Taco, no dejes de ver el video de abajo.