Como dueña de mascotas, hago todo lo que puedo por mantenerlas a salvo y saludables. Además de las visitas regulares al veterinario para cuidar su salud, tienen microchip y llevan un GPS, de manera que pueden ser rastreados si se alejan de mi jardín. No puedo imaginarme cómo me sentiría si alguien entrara a mi casa y dañara o robara a uno de mis bebés. Cosas como la electrónica y las joyas son sólo cosas, pero mis perros son irreemplazables.
Una familia en Australia se siente de la misma manera. Por ello quedan devastados cuando ladrones irrumpen en su casa y roban, entre otras cosas, el cachorro de su hija.
“Fue desgarrador, aún estoy temblando… estamos realmente tristes”, contó Elena Sardi ABC News.
Habían tenido a Sasha por un corto tiempo, pero su hija realmente tenía un vínculo con el adorable cachorro.
“No me importa el resto de las cosas, pero la perra, la queremos en casa lo antes posible… Es muy difícil explicar a alguien de cuatro años de edad cómo pudo suceder algo como esto, jamás creerías que se robarán un cachorro”.
La familia difundió la noticia del cachorro perdido. Esperaban que alguien sabría algo o que podrían apelar a la conciencia de los ladrones. Entonces recordaron que la perra tenía su microchip, y que ese microchip, que podía ser leído por cualquier veterinario o refugio de animales, tenía toda la información de los dueños. Quedarse con la perra hubiera significado para los ladrones arriesgarse a ser atrapados.
Con ese hecho en mente, parece que los ladrones se asustaron y regresaron a la escena del crimen, donde se colaron y regresaron el cachorro.
“Creemos que quien fuera que se la llevo, o tiene conciencia o se asustó y la arrojó por sobre la cerca”, añadió Ryan. “No nos importa, para ser honestos, estamos demasiado contentos por tenerla de vuelta”.
La policía de Victoria, Australia, compartió el video de abajo, ¡lo cual ayudó a llevar a Sasha a casa!