La peor pesadilla de cualquier abuelo es la experiencia de que su nieto se pierda. Este mundo es enorme para un niño, lleno de grietas y recovecos para perderse si nunca saliste de casa. Puedo imaginar el dolor y la ansiedad de su familia, en ascuas esperando el regreso a salvo de su preciosa bebé. ¡No podían suponer que tenía un peludo ángel guardián!
Se pensaba que la pequeña Charlee Campbell, de 2 años de edad, estaba durmiendo a salvo en casa de sus abuelos en un pequeño pueblo de Kentuky, EE.UU. Pero cuando su abuela despertó y se encontró con la puerta del frente totalmente abierta, y la pequeña desaparecida junto con la perra pitbull de la familia, Penny, el pánico la golpeó como una tonelada de ladrillos. Charlee padece autismo no-verbal, por lo que no habla demasiado y a menudo es extremadamente cautelosa. En cuanto se descubrió su misteriosa desaparición, todo el pueblo fue alertado para que buscase a la pequeña rubia vestida con pijama de “Frozen”, de Disney.
Todo el mundo —autoridades, grupos de búsqueda con sabuesos y voluntarios, salieron a buscar por todas partes, en el pueblo y en los bosques, a la niña desaparecida. Los grupos de búsqueda dicen que el terreno es peligroso, rocoso y lleno de serpientes.
Un vecino, Wayne Brown, estaba rezando en casa por la recuperación de Charlee sana y salva. En ese momento, la niña había estado desaparecida durante 36 horas. Su desaparición se había convertido en el tema del pueblo, y mientras todos la buscaban, él estaba sentado en su sofá rezando. Wayne había pasado por una experiencia similar antes con su propio hermano, quien se internó en el bosque cuando era niño, por lo que conocía esa angustia demasiado bien.
Es como si sus plegarias hubieran sido escuchadas y respondidas, pues Charlee apareció en el porche de Wayne al mismo tiempo que Penny fue hallada en la casa. ¡Tanto la perra como la niña regresaron luego de haber estado desaparecidas durante más de 30 horas! Charlee estaba sucia, deshidratada y tenía algunas picaduras de garrapata, pero apareció sana y salva.
La abuela de Charlee, Beth Campbell, cree que fue Penny quien mantuvo a Charlee a salvo. “Cuando mi perra no regresó a casa, y mi bebé no estaba en casa, ella no dejaría a ese bebé hasta que llegara aquí”. Continuó diciendo: “No puedo explicar siquiera lo feliz que estoy de que esta bebé esté en casa, porque la amo más que a nada en este mundo”.
¡Qué milagro con un final realmente feliz! Haz clic abajo para ver a la mamá de Charlee hacer declaraciones a la prensa.