Hay especies en este mundo que no tienen la capacidad de defenderse. Son presas naturales para muchos animales grandes y malos en el reino animal, y cualquier cosa que estos pequeños hacen para protegerse es insuficiente.
Cuando uno piensa en esas especies, los pingüinos no son lo que viene a la mente. Mucha gente cree que los pingüinos viven en climas fríos, en el ártico, y que son camaradas de sus compañeros los osos polares y los peces en el agua, cosa que es cierta. Pero los pingüinos también viven en otros lugares del mundo, y es en esos lugares que su vida está en peligro, donde a menudo son vistos como presas y donde hay muchos predadores. Uno de esos lugares es el sur de Australia.
Middle Island (“Isla del Medio”), en el sur de Australia tenía una gran población de zorros y pingüinos; estas aves son los pingüinos más pequeños del mundo. Desde hace ya unos años, los zorros han estado atacando a los pingüinos que viven en madrigueras y están en riesgo de ser masticados por estos agresivos caninos. Pero donde un canino amenaza su existencia, otro tipo de canino sale en su defensa. Los pastores de Maremma en Australia han aparecido en escena para asegurar que estos pingüinos vivan una vida pacífica en sus colonias, sin la intervención de los zorros.
¿Cómo es que hacen esto? Estos perros se mantienen en guarda, en manada, y ahuyentan a los zorros que se aproximan a estas colonias de pingüinos. Esta iniciativa cobró vida gracias a Peter Abbot, del Proyecto de Preservación de Pingüinos. Informado de la espantosa situación, Peter dijo a la BBC que los zorros en la zona habían matado a 360 pingüinos en una noche una vez. Llama a estos animales “asesinos entusiastas”, y dice que matarán cualquier cosa que se cruce en su camino.
Si bien Peter dirige el Proyecto de Preservación de Pingüinos, un granjero de gallinas fue quien tuvo la idea para acabar con este calvario: Envió a sus pastores de Maremma a ahuyentar a los zorros. Estos perros tienen características instintivas y son usados para proteger ovejas y cabras en el campo.
Entonces, ¿cómo funcionó toda esta analogía? Los pastores de Maremma se quedan cerca de las colonias de pingüinos, y así saben cuándo los predadores se acercan. Los zorros, sin embargo, rara vez se acercan a la zona, porque pueden escuchar a los perros ladrando y también olerlos desde lejos. Cuando esto sucede, los zorros cambian de dirección y se vana otra parte.
Ahora que han sido alejados completamente, Middle Island tiene una población de unos 200 pingüinos. Esta iniciativa inspiró a Hollywood para tomar la idea y llevarla a la pantalla grande. La película de 2015 titulada “Oddball” (“Bicho raro”) está inspirada por estos eventos sucedidos en Middle Island.
Haz clic en el video de abajo para ver a estos pastores de Maremma en acción, y saber más sobre este programa.